¡Hola!

Héctor García, Presidente de la Asociación Cultural Cineduca

Desde que somos pequeños, nos enseñan la importancia de conocer y entender nuestro entorno.

En el colegio, nos enseñan a leer y escribir. Aprendemos el código de la escritura y seguro que casi todos aún recordamos la sensación de ver, por primera vez, nuestro nombre escrito por nuestras propias manos.

Después, nos enseñan otras muchas cosas para descifrar el mundo que nos rodea: nos dan nociones de música, arte, aprendemos a desgranar una poesía y las distintas figuras retóricas que tiene nuestro idioma. Incluso aprendemos otros idiomas para poder movernos por el mundo.

Por eso, no dejó de sorprenderme descubrir que hay un código, esencial en nuestra vida, que no sólo no enseñamos a los niños si no que apenas dominamos los adultos. El código del Lenguaje Audiovisual.

Pensemos un poco en lo que hacemos, adultos y niños, en un día normal. Nos levantamos y desayunamos. Generalmente con la televisión o la radio puesta (audiovisual). En el trabajo y cada vez más (afortunadamente) en el aula utilizamos ordenadores y conexiones a internet en los que tenemos acceso constante a fotografía, vídeo, música, podcast… (más audiovisual).

Ya en casa, nuestro ocio principal es la televisión y/o videojuegos, internet, música… (más audiovisual)

Es decir, pasamos casi las 24 horas del día rodeados de imágenes y sonidos que muchas veces no sabemos ni interpretar.

¿Pensáis que exagero? Pensad en una escena de vuestra película o serie favorita… ahora PENSAD en ella… ¿sabríamos qué tipo de plano es ése que utilizan? Plano general, mehio, americano, primer plano… y, más importante, ¿qué significa ese plano?

Más complejo aún… ¿sabíais que el audiovisual también tiene figuras retóricas como las metáforas? ¿sabríamos distinguirlas e interpretarlas?

Seguramente, no.

Eso es lo que descubrí en los años en los que trabajé usando el audiovisual para lanzar “mensajes” en forma de valores a los niños. Vi que el problema estaba en que están expuestos a un lenguaje que conocen desde que nacen pero cuyas reglas nadie les ha explicado.

Es como las generaciones de nuestros abuelos. Sabían hablar, pero no sabían leer porque no conocían el código.

Es decir, en pleno siglo XXI vivimos en la Edad Media del Audiovisual, en el que todo el mundo sabe que existe, pero pocos son los que conocen sus claves.

Por eso nació este blog y la Asociación Cineduca, para acercar ese lenguaje a los niños. Que aprendan, poco a poco, a conocer, descubrir y disfrutar de una nueva forma de ver sus series, películas y vídeos favoritos. Porque detrás de todo audiovisual hay un código que, si sabemos “hablarlo” veremos, veréis, que los niños pueden contarnos cosas maravillosas a través de un nuevo medio.

Ese es mi pequeño proyecto. El que arranco en la blogosfera hoy.

Un proyecto que, espero, no hacer solo. Poco a poco, confío en que os animaréis a participar comentándonos vuestras dudas, haciéndonos sugerencias y, ¿por qué no? escribiendo post aquí que, seguro, nos ayudarán a mejorar a todos.

La Asociación realizará las actividades dirigidas a los más pequeños. Aquí y en nuestra web, redes sociales y el mundo 2.0 en general, es donde los padres, profesores, alumnos y todos aquellos que queráis conocer un poco más el mundo del audiovisual, sus secretos y curiosidades, tendréis vuestro espacio.

Porque hay un mensaje que me gustaría lanzaros hoy: nosotros no aprendimos a leer solos. Nuestros padres nos ayudaron.

No dejemos que los niños vean solos la televisión.

Ayudadles a Leer el Cine

Por mi parte, haré todo lo posible porque el viaje sea entretenido, ilustrativo y didáctico.

¡Ah!, por cierto, soy Héctor García, bloguero aprendiz, entusiasta de la comunicación audiovisual, eterno niño curioso y Presidente de Cineduca. Estoy encantado de que nos hayas encontrado y, como decían en el cine, espero que esto sea “…el comienzo de una bonita amistad”